El Instituto de Pesquisas Energéticas y Nucleares de Brasil (IPEN) confirmó que la Amazonia libera más dióxido de carbono (CO2) de la que absorbe.
La vegetación amazónica es por primera vez desde que existen registros, incapaz de absorber las emisiones de gases contaminantes, según el informe elevado por un equipo encabezado por la técnica Luciana Vanni Gatti, y publicado por el IPEN https://www.ipen.br/sitio/
El estudio, apunta que las lluvias están interfiriendo más que la temperatura en la capacidad de la floresta amazónica para reciclar el aire, según el análisis llevado adelante durante dos temporadas 2010-2011.
La descomposición de la vegetación ha modificado los balances entre fotosíntesis y respiración, según el estudio. El estudio contó con el apoyo del Natural Environment Research Council, de Gran Bretaña.
Las emisiones del principal gas de efecto invernadero –el CO2- se están viendo particularmente incentivadas por los cambios en las lluvias: las precipitaciones son menores a cualquiera de los registros en los últimos 30 años, comprometiendo la capacidad de absorción de carbono de la floresta. El aumento en la mortalidad y la descomposición vegetal, cambiaron además la relación entre fotosíntesis y respiración.
Además de todo esto, los incendios –en su mayoría provocados año la los para aumentar los terrenos de labranza y ganadería- han superado en una emisión de 300 billones de quilogramos de carbono, con un saldo final aún más negativo.