Londres pondrá en funcionamiento este año una red de alquiler de coches eléctricos, similar a la que está en marcha en París desde hace dos años, con el objetivo de disminuir las altas emisiones de CO2.
La iniciativa de potenciar el transporte verde, presentada hoy por el consorcio Transporte de Londres (Tfl), pretende rebajar los altos niveles de contaminación en la capital británica y funcionará de forma similar a como lo hace desde hace cuatro años el sistema público de alquiler de bicicletas.
El proyecto tendrá un coste de cien millones de libras (ciento diecinueve millones de euros) y lo desarrollará la empresa francesa Bluecar, que ya gestiona desde hace más de dos años el mismo servicio en París. Se espera captar a largo plazo a 60 000 clientes en la capital británica, que podrán reservar su coche a través del móvil y conocer la disponibilidad en tiempo real gracias a una aplicación de geolocalización.
Londres dispone actualmente de 1400 puntos de carga para coches eléctricos, cifra que además se ampliará hasta los 1500 en los próximos meses y que llegará a seis mil en cuatro años, según se explicó hoy durante la presentación del proyecto. Ello permitirá cargar los modelos de vehículos eléctricos que existen en el mercado en solo cuatro horas. “Tenemos ganas de incrementar la estructura y el parque de vehículos eléctricos en Londres, por lo que estamos muy contentos con este nuevo paso”, destacó Leon Daniels, director general de transporte de superficie de Tfl.
Actualmente el 23 % de los coches eléctricos registrados en el Reino Unido circulan en Londres y no están obligados a pagar la congestion charge, tasa que se aplica a todos los vehículos que circulan por el centro de la ciudad durante el día. Además de los puntos de carga, la empresa francesa ha desarrollado un prototipo propio de vehículo eléctrico con doscientos cincuenta kilómetros de autonomía para la prevista red de alquiler de vehículos en Londres.
La capital británica, con una población de más de ocho millones de habitantes, contará con un centenar de estos modelos en una primera fase, que podrán utilizar tantas veces como quieran aquellos que estén suscritos al servicio. “El alquiler del vehículo eléctrico está siendo muy popular en París y creemos que también lo puede ser en Londres, ofreciendo a los ciudadanos un medio de transporte de bajo coste y respetuoso con el medio ambiente”, dijo Vincent Bolloré, presidente del grupo Bolloré, del que forma parte Bluecar.