Al concluir el análisis de estudio de Manifestación de Impacto Ambiental, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en Yucatán, dictaminó a favor de que se construya un parque eólico en el municipio de Dzilam de Bravo, confirmó Benigno Villareal del Rio, director general de la empresa Vive Energía-Eólica del Golfo, que se encarga de dicho proyecto.
La Semarnat informará sobre el resolutivo de este dictamen hasta la próxima semana, cuando se publique en su Gaceta oficial. El estudio tardó cerca de 10 meses, e incluso se hizo una consulta pública para conocer a detalle los beneficios e impactos ambientales de la obra.
De acuerdo con datos recabados, una vez concluida la obra, la superficie realmente utilizada es de tan sólo el 2,5%, por lo que el espíritu de la tierra se conserva, pues se podrá seguir utilizando para cualquier actividad agrícola o ganadera que se llevaba a cabo previo a la existencia del proyecto.
Los propietarios de los terrenos que se ven beneficiados con el proyecto cobrarán por concepto de usufructo, anualmente, el equivalente al valor que les dejaría la venta del terreno.
En cuanto a empleos, durante la obra habrá hasta 250 empleos temporales, una vez concluida la obra (10 a 12 meses), se mantendrán 25 empleos permanentes de Vive Energía y entre 10 y 50 empleos de proveedores contratados por Vive Energía para llevar a cabo obras de mantenimiento civiles (caminos, accesos, letreros, seguridad, etc) así como de los programas de seguimiento y monitoreo ambiental.
La inversión del proyecto Eólico de Dzilam superará los 1.800 millones de pesos, mientras que el presupuesto anual de mantenimiento y operación supera el presupuesto acumulado de los municipios de Dzilam Bravo, Dzilam González y Temax.
Se evitará con el Proyecto Eólico de Dzilam la emisión de más de 160,000 toneladas de CO2 a la atmosfera de forma anual, gas nocivo que es el principal causante del Cambio Climático.
Villareal del Rio señaló que hace unos días dicha Secretaría les notificó que el dictamen favoreció a la empresa, pero con las condicionales de que tienen que realizar más estudios y programas que garanticen que no habrá un impacto ambiental severo en la zona donde se levantará la obra.
En ese sentido, el empresario calculó que una vez terminadas dichas acciones, el parque eólico de Dzilam de Bravo empezará a construirse en el mes de septiembre de este año.
“Es natural que para este tipo de proyectos la Semarnat la apruebe de manera condicionada, estamos a favor de que continúen los estudios porque el compromiso ambiental es clave para nosotros, y seguiremos con la misma disposición de trabajar de la mano del gobierno para llevarlos a cabo”, indicó, al precisar que la empresa tendrá que invertir un importante capital económico en dichos estudios y programas.