Siemens anunció el despido del 75% de los 200 empleados de su fábrica de energía termosolar en Beit Shemesh, después de no poder encontrar un comprador para ella.
Siemens AG despedirá a 150 de los 200 trabajadores de su fábrica de energía solar termoeléctrica (anteriormente Solel Solar Systems) en Beit Shemesh, después de no poder encontrar un comprador para ella. Siemens adquirió la compañía termosolar por 418 millones de dólares en 2009 al fundador Avi Brenmuller y otros inversores.
Desde la adquisición, Siemens ha cancelado cientos de millones de euros en la inversión, pero la pérdida total es aún mayor debido a la actual financiación de la fábrica en los últimos cuatro años a un coste adicional de cientos de millones.
En su pico, la unidad, conocida como Siemens energía solar termoeléctrica tenía 400 empleados. Los 50 trabajadores restantes proporcionarán servicios de apoyo técnico para un proyecto termosolar español, que se conectó a la red hace un año, y para otros tres proyectos españoles, que están a punto de finalizar.
Desde la adquisición, Siemens ha cancelado cientos de millones de euros en la inversión, pero la pérdida total es aún mayor debido a la actual financiación de la fábrica en los últimos cuatro años a un coste adicional de cientos de millones.
En su pico, la unidad, conocida como Siemens energía solar termoeléctrica tenía 400 empleados. Los 50 trabajadores restantes proporcionarán servicios de apoyo técnico para un proyecto termosolar español, que se conectó a la red hace un año, y para otros tres proyectos españoles, que están a punto de finalizar.
A finales de 2012, Siemens anunció que abandonaba el negocio de la energía solar, que además de la energía termosolar (que incluye la producción de la fábrica de Beit Shemesh), incluía la planificación y construcción de centrales de energía solar fotovoltaica. La decisión de la compañía se debió a los resultados decepcionantes del sector termosolar y la debilidad del mercado tras el parón en España, decretado por el gobierno conservador del PP, cuyo interés en las energías renovables es nulo.
La tecnología termosolar desarrollada en Israel se convirtió en demasiado cara después de la caída de los precios de los paneles de energía solar fotovoltaica y la incertidumbre regulatoria. Aunque Siemens recibió varias ofertas para la fábrica de Beit Shemesh, sólo Abengoa de España tenía los medios para mantenerla en funcionamiento. Sin embargo, Abengoa retiró su oferta debido a la incertidumbre sobre el futuro del mercado de la termosolar, a pesar de que Siemens había acordado, en principio, financiar las operaciones de la fábrica durante dos años, "hasta que la imagen sea clara."