Septiembre era la fecha para la que estaba programada la entrada en operación del parque eólico Los Cururos, una obra de infraestructura de 200 millones de dólares que adelanta la filial de EPM en Chile en la zona norte de este país.
Sin embargo, según los cálculos de la empresa de servicios públicos, los avances en la obra permitirán que en diez días inicien las operaciones de prueba de los primeros aerogeneradores, y que en junio arranque la operación comercial del parque eólico.
“La infraestructura está prácticamente construida, lo que falta simplemente son unos procesos de conexión a la red eléctrica, que en estos grandes proyectos son un tema delicado pues hay que seguir unos protocolos que tiene en este caso el transportador de energía que hay en Chile, Transelec S.A., y que se coordina con la entidad que maneja el despacho de carga en Chile, Cdec-Sic. Entonces estamos en esa etapa final del proceso”, sostuvo el gerente general de la filial, Eduardo Cadavid.
Este parque está compuesto por 57 aerogeneradores que producirán 109,6 megavatios. En la actualidad, la mayor generadora eólica en operación en ese país, ubicada también en la región de Coquimbo (norte), es Parque Talinay Oriente y genera 90 megavatios.
Cuando entre en operación, Los Cururos será el segundo generador eólico más grande de ese país, después del parque El Arrayán, que producirá 115 megavatios y está en construcción también.
De acuerdo con el gerente de la compañía, parte del éxito del proyecto radicó en la alianza de EPM con la firma danesa Vestas, con la cual suscribió un contrato ‘llave en mano’, lo que significa que esta empresa se encargó de la ejecución del proyecto.
“Es una empresa de primer nivel en la industria eólica mundial, todas las partes de los aerogeneradores, que ellos construyeron y montaron, son fabricadas en plantas ubicadas en Europa y Asia y fueron importadas a Chile”, explicó Cadavid.
El parque eólico Los Cururos es la primera obra que hace la filial de EPM en Chile, y por lo tanto solo con la entrada en operación de este proyecto la sucursal empezará a recibir ingresos.
La directriz de la compañía es buscar negocios, no solo en el campo de generación, sino también de transmisión de electricidad, suministro de agua potable, gestión de aguas residuales y residuos sólidos.
De acuerdo con Proexport, las mayores oportunidades de las empresas de servicios colombianos en ese país están en el campo energético, tanto en servicios de ingeniería como en desarrollo de proyectos de generación y transmisión.
Y es que desde hace una década, este país vive una crisis en este sector dado que la demanda energética ha crecido muy por encima de las inversiones en esta área. Por esto es una de las naciones con la electricidad más cara de América Latina. Los altos costos también facilitan la construcción de mayor infraestructura de generación basada en fuentes renovables no convencionales, como el viento y la luz solar.
De acuerdo con Cadavid, esta circunstancia hace que el foco de la compañía se centre precisamente en esta área de negocios. “Creemos que tenemos grandes oportunidades de entrar a proveer ese servicio con base en lo que sabemos hacer y la experiencia que hemos desarrollado principalmente en Colombia. Pero como grupo multilatino tenemos empresas en Centroamérica de las cuales podemos obtener capacidades para construir nuevas iniciativas en Chile”, señaló.
Aunque el ejecutivo confirmó que sí estaban negociando nuevos proyectos en este país, aseguró que aún no se podían dar a conocer porque deben concretarse primero.
De acuerdo con el Gobierno de Chile, el incremento de la demanda de la energía podría hacer que los costos de la electricidad se incrementen en 34 por ciento en la próxima década.
Por ello, la presidenta Michele Bachelet lanzó la semana pasada una agenda de energía que aportará US$ 250 millones en inversiones para el sector y US$ 400 millones para fortalecer la Empresa Nacional del Petróleo, Enap
“El país necesita nuevas inversiones, mejorar la infraestructura de generación y transmisión, y más competencia con nuevos actores”, fue el mensaje de la presidenta del país.
Pero además, de acuerdo con la ley de energías renovables de Chile para el 2025, el 20 % de portafolio de las generadoras de energía eléctrica debe provenir de fuentes renovables no convencionales. Es decir, que las empresas deberán o construir nueva infraestructura o comprar energía de otras empresas que usen estos recursos.
“Esto, sin duda, es un estímulo para invertir en nuevos proyectos de energía eólica y fotovoltáica”, señaló Eduardo Cadavid, de EPM.