Cuatro empresas eólicas propusieron un proyecto eólico de 8.000 millones de dólares que en un decenio contempla enviar energía eólica desde las planicies de Wyoming a viviendas del sur de California.
Si se aprueba y financia, el enorme proyecto produciría energía limpia equivalente a la de una planta electronuclear grande y construiría las mayores eólicas del mundo cerca de Cheyenne, un enorme centro de almacenamiento de energía dentro de cavernas en Utah y una línea de transmisión de 845 kilómetros (525 millas) para conectarlas.
“Este sería, sin duda, uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos y costosos que hemos visto”, dijo Travis Miller, analista del sector eléctrico para la firma de investigaciones en inversiones Morningstar Inc. “El almacenamiento de energía, aunado a la generación de energías renovables, ha sido la piedra angular de las empresas de servicios públicos”.
Jeff Meyer, de Pathfinder Renewable Wind Energy, una de las compañías detrás del plan, lo describió como “la presa Hoover del siglo XXI”, refiriéndose a la represa de 222 metros de alto (726 pies) en el río Colorado que desde hace decenios genera energía hidroeléctrica para Nevada, Arizona y California.
El anuncio se hizo el mismo día en que el presidente Barack Obama presionó a los líderes mundiales a seguir el ejemplo de Estados Unidos en una cumbre de un día en las Naciones Unidas con el fin de lograr apoyo a un tratado sobre el cambio climático para reducir los gases de efecto invernadero.
La nueva propuesta, con una fecha tentativa para completarse en 2023, tiene el potencial de generar dos veces más electricidad que la hidroeléctrica Hoover, construida en la década de 1930. El éxito del proyecto depende de numerosas incertidumbres, como superar los obstáculos normativos del gobierno y concretar acuerdos para vender la electricidad, lo que sería esencial para asegurar el financiamiento.
Con cambios potenciales en las políticas gubernamentales, normas ambientales y los retos económicos de generar energía limpia, “cualquier proyecto de infraestructura que demore nueve o 10 años tiene muchas incertidumbres”, dijo el analista Miller.
Las compañías Pathfinder Energy, Magnum Energy, Dresser-Rand y Duke-American Transmission Co. expresaron en un comunicado que planean presentar el proyecto a la Autoridad Pública de Energía Eléctrica del Sur de California a principios de 2015.
Funcionarios de esa entidad dijeron que no conocían la propuesta. La Autoridad ha solicitado propuestas para entregar a la región de Los Ángeles electricidad generada con medios renovables, como lo exige la ley estatal.
El nuevo plan “competiría con 200 propuestas”, dijo Steven Homer, director de proyectos de la Autoridad, cuyos miembros entregan electricidad a unos dos millones de clientes.
Una parte clave del plan es un centro de almacenamiento de energía, que costaría 1.500 millones de dólares, cerca de Delta, Utah, 210 kilómetros (130 millas) al suroeste de Salt Lake City. En esa zona rural ya funciona una planta a carbón que genera electricidad para el Condado de Los Ángeles.
Según la propuesta, la energía se almacenaría a través de un sistema de aire comprimido utilizando cavernas, similar a un sistema que se usa en Alabama de principios de 1990. Cuando la demanda de electricidad es baja, el exceso de energía se usaría para comprimir e inyectar aire a alta presión en las cuatro cavernas, cada una con un volumen de 1,2 millones de metros cúbicos (41 millones de pies cúbicos).
En momentos de alta demanda de electricidad, el aire a alta presión se combinaría con una pequeña cantidad de gas natural para hacer funcionar los aerogeneradores.