El accidente de la central nuclear de Fukushima, Japón, mostró al mundo los peligros de la energía nuclear, cara y peligrosa.
El pueblo de Iitate, en la prefectura japonesa de Fukushima, construirá por esfuerzo propio una central de energía solar fotovoltaica, en un intento por eliminar las consecuencias del desastre nuclear de marzo del 2011, según informaciones de la televisora NHK.
Norio Kanno, alcalde de la localidad, dijo que recibirán asesoría de una empresa de equipos eléctricos de Tokío, pero se mostró confiado en reubicar a los pobladores evacuados desde la fecha de la catástrofe.
El funcionario explicó que la electricidad generada será vendida a empresas de servicios eléctricos y lo recaudado servirá para reconstruir Iitate, ubicada dentro de la zona de exclusión por los efectos contaminantes generados por la destruída central nuclear de Fukushima.
Tras el sismo y posterior tsunami del 11 de marzo del 2011, de Fukushima y regiones aledañas, fueron evacuados más de 80.000 pobladores, la mayoría de los cuales siguen en esa situación a más de dos años del desastre.
El funcionario explicó que la electricidad generada será vendida a empresas de servicios eléctricos y lo recaudado servirá para reconstruir Iitate, ubicada dentro de la zona de exclusión por los efectos contaminantes generados por la destruída central nuclear de Fukushima.
Tras el sismo y posterior tsunami del 11 de marzo del 2011, de Fukushima y regiones aledañas, fueron evacuados más de 80.000 pobladores, la mayoría de los cuales siguen en esa situación a más de dos años del desastre.